7.1.11

"Hongos la eyaculadora y !JO que noche!.

Andaba alucinando con la noticia de que un hombre con claros síntomas de embriaguez quería cepillarse a su mapache, y este ante su negativa le había seccionado el pene, cuando ha llamado el cartero con un paquete para mí. Desprendía un olor conocido, que  me costaba  identificar, en su interior un jumelaje de boletus, setas y champiñones. Contenía también una carta de mi buen amigo Patxi Txakurras que hablada de algo asombroso.

Querido Candido:
Me he vuelto a enamorar y además me estoy forrando pero antes de nada decirte que soy feliz, si Candido muy feliz.
Como tu ya sabes paso siempre la Nochebuena en soledad, pero este año el silencio me comía y decidí salir a dar una vuelta, corta eso sí. Me apañé un poco por si acaso surgía el milagro y llamé al ascensor. Veintitrés pisos hasta llegar al portal. Y justo cuando me disponía a salir a la calle !Sorpresa!  una dama, me puse el chip de ciudadano y le comente con sana intención: "Hace buena noche". A lo que ella respondió con una voz  erótica donde las haya "Siiiii, una noche muy caliente y relativamente húmeda!.
Sin mediar una palabra más, volvimos después de unos minutos a entrar en el ascensor, a la altura del octavo  me miro a los ojos y rodeando mi cuello con sus brazos, sinceramente me dijo. "Esta noche es nochebuena y mañana dios dirá".
Si el ciego quiere ver y el cojo sueña con correr, a mi querido amigo,  me apetecía ser coprotagonista de esa historia. 

!ASOMBROSO!  !ALUCINANTE!. Nunca vi una hembra que eyaculara de tal forma, el monasterio de piedra en temporada alta, la gota fría pasada por el calentador.
A la mañana siguiente todo el día en su casa y eso seguía igual, el origen de la vida, líquidos, sudor, gritos incontrolados hasta tal punto que hizo saltar en mil pedazos la lampara de la mesilla.
Stop, no puedo más! Estaba exhausto, le suplique necesito descansar. Cual es mi sorpresa que al encender la luz del dormitorio, aprecio una imagen dantesca, todo el habitáculo lleno de boletus, rebollones, champiñones....sobre la alfombra, bajo el colchón, por las paredes...adheridas a los muebles, todo repleto de setas conocidas y desconocidas.

Candido he cogido treinta cosechas en ocho días, ya sabes que en país vasco aprecian mucho estos productos. Nos  estamos forrando la dama de los mares de agua dulce y yo, y esto va para largo. Ando demacrao pero dentro de unos días veras mi imagen en los medios de comunicación, al parecer también tienen efectos afrodisíacos. Si Candido pronto verás "Hongos la eyaculadora"..   

La esperanza es lo último que se pierde. Agur Candido, Agur.